Inteligencia emocional infantil y juvenil
Linda Lantieri, con introducción de Daniel Goleman.Ed. AGUILAR
En este libro su autora Linda Lantieri junto con Daniel Goleman proponen una guía para ayudar a los hijos a comprender mejor sus emociones y las de los demás, y por tanto mejorar su autoestima y responsabilidad hacia los otros y hacia el entorno.
Dos son las técnicas que plantean para lograrlo: la práctica de la atención plena y la relajación muscular progresiva.
Tras un capítulo introductorio en el que nos acerca a la importancia de enseñar a nuestros hijos la llamada inteligencia emocional, que no es otra cosa que ser capaces de adaptarse interiormente a las diferentes circunstancias que atravesamos en la vida, los siguientes capítulos se centran en la práctica de las técnicas antes mencionadas por diferentes tramos de edad desde los 5 hasta los 12 años.
Enseñando a expresar la ira. ¿Es una emoción positiva en la evolución de nuestros hijos?
Mª del Pilar Álvarez Sandonís. Ed.PIRÁMIDE
En este libro se aborda la emoción de la ira en los diferentes momentos evolutivos de nuestros hijos y nos ayuda a comprenderles y a ejercer un acompañamiento positivo en su crecimiento y maduración.
La primera parte del libro nos introduce en el significado de esta emoción, sus diferentes manifestaciones en los distintos estadios evolutivos, así como el mejor modo de abordarlas. La segunda parte propone técnicas, juegos y actividades para que toda la familia trabaje junta en un manejo positivo de esta emoción que puede de otro modo resultar tan estresante para todos.
Cómo hablar para que sus hijos le escuchen y escuchar para que sus hijos hablen.
Adele Faber & Elaine Mazlish. Ed. Medici
Este clásico libro de comunicación con los hijos nos ayuda a abordar las relaciones con nuestros hijos de modo gratificante a través de la enseñanza de métodos comunicativos eficaces que promueven la colaboración, ayudándonos a enfrentarnos a los sentimientos más complicados sin juzgarlos, al mismo tiempo que establecemos límites firmes pero sin enfado, y solucionamos los conflictos familiares pacíficamente.
El libro está ilustrado con viñetas que muestran las habilidades en la práctica y ofrecen posibilidades creativas de afrontar problemas comunes.
Nancy Samalin. Ed. MEDICI
En este libro se abordan los retos a los que padres y madres nos enfrentamos en la educación de los hijos: cómo solucionar las pequeñas “batallas” cotidianas aprendiendo todos de estas situaciones, cómo resolver las rivalidades entre hermanos, el establecimiento de límites como manera de preparar la felicidad futura de nuestros hijos en un mundo repleto de pequeñas y grandes frustraciones, cómo aprender los adultos a manejar los enfados de los hijos y nuestra propia rabia en momento estresantes, cómo aprender a ser más flexibles… Todo el libro está repleto de diálogos reales entre padres e hijos acompañados de un análisis del efecto en los niños de las palabras de los adultos. Es un libro de gran ayuda para reflexionar sobre la gran cantidad de respuestas automáticas que surgen en nuestro día a día y cómo podemos poner en práctica otro tipo de respuestas, meditadas y reflexivas, que nos ayudan a generar unas relaciones más positivas y enriquecedoras.
Catherine L’Ecuyer. Ed. PLATAFORMA ACTUAL
Este libro adentra al lector en una reflexión sobre el mundo en el que les ha tocado crecer a nuestros hijos, que impone un ritmo frenético y competitivo: todo tiene que darse y obtenerse ya, y el esfuerzo se valora como un problema a evitar.
Este enfoque de nuestra sociedad actual que se conforma tantas veces con lo rápido y superficial
aleja a nuestros hijos de la verdadera capacidad de observación y reflexión sobre la realidad, que suele ser más lenta y profunda, del disfrute de un ocio sencillo y abierto a la belleza de la naturaleza, y adormece el gran tesoro que tiene la infancia: su capacidad de asombro.
Qué puedo hacer cuando estallo por cualquier cosa
Dawn Huebner. Ed. TEA
Este libro presenta a las familias que tienen problemas con el manejo de la ira un material práctico y ameno, lleno de actividades prácticas para que los hijos puedan ir haciendo poco a poco, con la ayuda de los adultos, ejercicios de autoconocimiento, de relajación, de reflexión sobre sus sentimientos y los de los demás, así como aprendan a conocer los desencadenantes de sus momentos de falta de control, y puedan de modo creativo y sencillo ir encontrando estrategias para resolverlos de un modo satisfactorio para todos.
Daniel J. Siegel y Mary Hartzell. Ed. LA LLAVE
Este magnífico libro reflexiona de modo muy profundo sobre las relaciones entre padres e hijos, y el desarrollo y crecimiento personal tan grande que se puede producir a través de las interacciones cotidianas. Nos anima a los padres a adentrarnos en aquellas reacciones que, de modo casi inconsciente y sin control, tenemos en determinadas situaciones con los hijos. Estas respuestas mecánicas tienen un porqué, seguramente con raíces ancladas en nuestra propia infancia, y en la educación y convivencia con nuestros hijos tenemos una magnífica oportunidad para volver a mirar y comprender de modo más claro estas experiencias pasadas. Vivir de nuevo estas situaciones no resueltas de nuestra niñez y nos ayuda a comprendernos mejor a nosotros mismos y de este modo entender nuestras reacciones a veces impulsivas con los hijos. Este aprendizaje de los adultos es imprescindible para crear unos vínculos cada vez más fuertes y auténticos con los hijos.
Tranquilos y atentos como una rana
Eline Stel, Ed. KAIRÓS
Este libro aporta una reflexión muy interesante acerca de qué es el mindfulness, y porqué puede ser una herramienta imprescindible para la educación integral de nuestros hijos, así como para los adultos que lo practican con ellos.
La autora nos introduce en el camino que le condujo a ella a encontrarse con el mindfulness, que define como la capacidad de estar conscientemente presente, y aporta una serie de ejercicios prácticos para que los padres realicen con sus hijos, enseñándonos cuál es el beneficio concreto de cada uno de ellos y en qué situación puede ser de mayor ayuda
Cristina Núñez y Rafael Romero, PALABRAS ALADAS
Un itinerario a través de las emociones que tenemos cualquier ser humano. Con esta herramienta los niños crecerán aprendiendo a identificar cualquier sentimiento y aprenderán a controlarlos.
Consejos para que el diccionario de emociones te sea aún más útil.
Como el Emocionario lo utilizan personas de distintas edades (niños y adultos), hemos segmentado la información por franjas.
Para niños de 3 a 6 años
Cuando los niños experimentan una emoción determinada, que todavía no conocen, se puede leer la definición en el “Emocionario”. Así, los niños van identificando lo que oyen con lo que sienten. Esto tiene un efecto tranquilizador y normalizador: por un lado, aprenden que lo que sienten tiene un nombre; por otra parte, saben que otras personas sienten lo mismo.
Para niños de 7 a 9
Que los adultos y los niños compartan experiencias vinculadas a determinadas emociones contribuirá a establecer vínculos más fuertes y a que los miembros de la familia se conozcan mejor unos a otros. A algunos niños les asombra comprobar que sus padres también sienten miedo o inseguridad. Esto ayudará, además, a fortalecer la empatía de los niños y su capacidad para ponerse en el lugar del otro.
Para niños de 10 a 12
A estas edades, los niños van experimentando cambios físicos y psíquicos impredecibles, sorprendentes e inesperados. El “Emocionario” puede ser un gran aliado en la intimidad como lectura rutinaria: con la lectura diaria, se crea un tiempo y un espacio íntimos en los que reflexionar sobre las propias emociones y acostumbrarse a procesar lo vivido sin dejar que se enquiste. Además, aconsejamos ayudarse del “Diario de la Gratitud” para ir anotando esos sentimientos y emociones que, especialmente en esta etapa, suelen parecer desbordantes e ingobernables.
Para otros lectores
Por lo general, utilizamos sólo cuatro o cinco términos para expresar nuestras emociones. Esa manera de sintetizar nuestro vocabulario emocional influirá en los niños de nuestro entorno, ya que el ejemplo es su principal fuente de información. Si nosotros nos refiriésemos al naranja, amarillo y rojo con el término naranja, los niños se expresarían de la misma manera.
Conscientes de esto, muchos docentes y otras personas con niños a su cargo, utilizan el “Emocionario” para refrescar los matices entre unas emociones y otras y así conseguir que los niños adquieran un vocabulario que dé cuenta de su riqueza emocional.
Puedes ver más detalles del “Emocionario”, y descargarte una muestra del libro en formato PDF, en http://www.palabrasaladas.com/emocionario.html